1) Nadie debe esperar recibir nada a cambio de nada. Los dientes del caballo dado siempre deben examinarse cuidadosamente. Siempre hay algo que no suena o sabe muy bien en una oferta comercial que promete enormes ganancias de la noche a la mañana. Del mismo modo, aunque a todo el mundo le encantan las gangas, no son lo que parecen. Antes de comprar, sacar un préstamo o invertir, investiga hasta el final.
2) Haga negocios solo con personas establecidas y empresas con buena reputación.
3) No firmes ningún contrato, convenio o documento sin haberlo leído atentamente y asegurándote de que entiendes todo lo que contiene. Si tienes la más mínima duda sobre el documento que vas a firmar y lo que conlleva, consulta con un abogado. De esta manera puede ahorrar burlas y mucho dinero.
4) Por último, y quizás lo más importante, sea usted mismo escrupulosamente honesto. A menudo se dice que es imposible engañar a un hombre serio, sea cual sea la estafa, y que el estafador invoca invariablemente los instintos de robo reales o latentes de sus víctimas. Esto es claramente una exageración, pero ciertamente es verificable que un hombre serio desdeñará cualquier plan dudoso, a pesar del tamaño de los beneficios prometidos.
En definitiva, una persona seria y honesta que se tome el tiempo de examinar a plena luz del día todas las propuestas que se hagan, no será víctima de estafadores ".
(Libro: Cómo ser un ejecutivo exitoso, Jean Paul Getty, Ed. Iberonet, S.A., Madrid, 1994, Cap. 10, p.133).